Se trata de una pequeña fuente octogonal realizada en piedra arenisca en tonalidades claras, en la que destaca sus reducidas dimesiones. Al carecer de salida de desagüe, debió de tratarse de una pila concebida para que el agua rebosara, creando una sonoridad relajante propia del arte islámico.PAnalizaremos su funcionalidad y vínculo con el mobiliario y casa musulmana; higiene, religión, purificación, elemento para refrescar… Así como su decoración en intima realaión con su función, donde destacan algas o plantas que parecen «mecerse» en el agua y animales acuáticos como tortugas y peces, (que encontraremos en otras piezas clave del Museo) creando una concordancia entre su decoración y su uso.

Con esta pila fluiremos por el museo visitando los cuatro elementos que se dan cita en esta singular pieza: fauna, flora, agua y tradición musulmana.

Horario: Los sábados a las 12 h.

Lugar: Sala II, Museo de la Alhambra, Palacio Carlos V.